lunes, 6 de agosto de 2012

De repente despierto y me doy cuenta.

Pues es verdad el dicho ese que dicen de que no te das cuenta de lo que tienes hasta que lo pierdes. Por suerte yo no he tenido que perderlo para darme cuenta de todo lo que tengo, simplemente he tenido que estar a millones de kilometros de todo para darme cuenta. Este mes fuera, sin nada de todo lo que es mio, me ha hecho darme cuenta de lo mucho que lo necesito. Y aunque ha sido un mes genial, he echado mucho de menos mi vida y me he dado cuenta de lo afortunada que soy por tener esta vida, que no cambiaria nada, porque me gusta todo: cada pelea con mis hermanos, cada bronca de mi madre, cada abrazo de mis amigos, cada beso de mis abuelos... Todo en mi vida encaja. Me he dado cuenta de lo mucho que necesito a todos y cada uno de mis amigos, que me encanta pasar el tiempo con ellos, me he dado cuenta de lo genial que me lo paso entrenado con todo mi equipo, me he dado cuenta de que mi familia son lo mejor que hay. Me he dado cuenta de que tengo todo lo que necesito, puede que no tenga una media naranja, pero no la necesito, tengo 15 años y no necesito ningún tipo de compromiso y que para quererme ya estan mis padres y mis mejores amigos. Mi media naranja puede esperar.
Simplemente quiero agradecer tener todo esto:






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